Ayer celebramos
el día de la madre:
Muchas felicidades a todas las sufridoras con hijos con
TDAH que, incluso durmiendo, están pensando en ellos y en cómo ayudarles en
cada momento. Para nosotras, todos los días son el día de la madre, no porque
lo celebremos a diario, sino porque diariamente nos toca enfrentarnos a
innumerables desafíos.
Como nota de
humor y a modo de felicitación, os copio este artículo de la revista Telva para
que al menos, mientras que lo leéis, os
riais un ratito…
Hoy también, ¡¡¡Feliz día, mamás!!!
Es bien
sabido por todos:
Cuando las mujeres son madres por vez primera, se les entrega
un manual de chascarrillos y expresiones con las que lidiar con los hijos que
acaban de traer al mundo.
Como cualquier manual, tiene sus capítulos: preguntas
retóricas (¿tú que te crees, que soy el Banco de España?), amenazas (como vaya
yo y lo encuentre...), advertencias (échate una rebequita por si acaso) o dichos
de la hora de comer (bébete el zumo que se le van las vitaminas).
Con motivo
del día de la madre, hemos reunido algunas de ellas, que habrás dicho y/u oído
más de una vez...
Llega el día
en el que te cansas de la bici y le pides a tu madre un patinete. O unas
deportivas con ruedas (¿qué clase de tecnología suiza tienen esas deportivas
que permiten andar y patinar?) Y se lo dices. Mamá, ¿me compras unas zapatillas
con ruedas? Y tu madre, que quiere que interiorices el sentido de la ironía desde
bien pequeña, te responde: dos te voy a comprar.
Si es más de letras que de
números, te dará una lección magistral de creatividad gramatical: Mamá, ¿me
compras unas zapatillas con ruedas? Unos zapatillos con ruedas. Y así con ni
consola ni consolo, ni tableta ni tableto, e incluso ese clásico, cuando le
ruegues, le supliques y se lo pidas cien veces por favor: ni por favor ni
porfavora. Los días que amanezca creativa, se atreverá incluso con el ni por
favor ni sin favor o su versión diminutivo: ni porfa ni sinfa.
Como quiere
que, también desde la más tierna infancia, vayas conociendo las instituciones y
agrupaciones empresariales, durante tu exposición del análisis DAFO de por qué
necesitas unas zapatillas con ruedas, te interrumpirá y preguntará: ¿Tú qué te
crees, que soy el Banco de España? Y como ella puede hacer no una si no dos cosas a la vez -como las zapas con ruedas que te va a comprar- , te habrá dado
una lección, además de sobre instituciones, sobre recursos literarios: lección
1, la pregunta retórica. La lección 2 vendrá con el ¿Tú qué te crees, que
tenemos un primo en Unión Fenosa? cuando te dejes la luz encendida y la 3
cuando le digas que te quieres hacer un pendiente porque todos tus amigos lo
llevan: ¿qué pasa, que si tus amigos se tiran por un puente, tú te tiras por un
puente? La lección avanzada de preguntas retóricas coincidirá con tu primera
juventud y las quejas de tu madre de que solo vas a casa a dormir y a comer:
¿Tú que te crees, que esto es una pensión?
Al final te
compra las zapatillas con ruedas, y, como siempre has sido una intrépida,
pruebas a tirarte por el tobogán (de pie, por supuesto) para estrenarlas. Tu
idea provoca su cólera, y echa mano del capítulo de advertencias y amenazas,
uno de los más dilatados del del manual de frases de madre, y te grita: como te
caigas, encima te voy a dar yo. En el capítulo hay amenazas más sutiles. Es el
caso de como vaya yo y lo encuentre, que te da otra lección de recursos literarios:
el poder de la elipsis, de la insinuación, de cuya efectividad te diste cuenta
definitivamente cuando te fuiste por primera vez de vacaciones sola y tu madre
te despidió con un: No te digo ná... Justo antes te dijo échate una rebequita
por si acaso, aun a sabiendas de que te ibas a Murcia y es agosto.
Acabaste
usando la rebequita pese a tu negativa inicial a llevarla pero... ¿qué paso con
el tobogán? Te caíste y rompiste las zapas con ruedas. Y tu madre, lejos de
darte ella también, te consoló y hasta que no dejaste de llorar no se dió
cuenta de que la tecnología suiza no era para tanto y a una zapatilla se le
había salido una rueda. Se le olvidaron inmediatamente tus lágrimas y te dijo:
ya puedes rezar para que tenga arreglo. O quizá como se haya roto, no vas a
tener parque para correr (capítulo amenazas y advertencias, epígrafe rotura de
objetos).
El tamaño y
la rotundidad del capítulo de amenazas y advertencias solo es comparable al de
"dichos de la hora de comer". Te sonarán bébete el zumo que se le van
las vitaminas, no me he pasado dos horas cocinando para que no te lo comas y si
no te lo comes, te lo cenas. Y si no, te lo desayunas. El es la primera vez que
me siento en todo el día no es estrictamente un dicho culinario, pero sí que
recurrente a la hora de comer.
Pero volvamos
a las zapatillas de ruedas. Cuando ya no tuviste edad de usarlas tu madre tuvo
que renovar su repertorio de citas de madre de niña y cambiarlas por el de
citas de madre de adolescente. Y entonces llegaron el a ver si te echas novio
ya y te vas de casa pero también el primero los estudios, luego el novio. Vino
el tú no estudies, que ya vendrá Paco con las rebajas (¿quién es exactamente
Paco y qué rebajas trae?), el mientras vivas bajo mi techo harás lo que yo
diga, el si yo me fío de ti, de quien no me fío es de la gente y, sobre todo,
el ah, ¿que ahora se lleva eso? Pero sobre todas las frases de madre de manual,
hay una representativa, que encierra la confianza y el cariño con el que, al
fin y al cabo, se construye el manual de chascarrillos de madre: esto no se lo
cuentes a tu padre, ¿eh?
FUENTE:
Ana Iris
Simón.
hola gloria yo tmbn tengo un niño con tdha y encontre tus consejos par modificar l conduct que espero que puedan ayudarme ....ya que aca en lima no encuentro centros que me puedn ayudar....
ResponderEliminarhola gloria gracias por los tips para el tdha
ResponderEliminarMi hijo tiene 6 años y tiene tdha... me siento frustrada al no sabes r como ayudarlo... Su rendimiento es bajo en el colegio y no se si medicarlo.. Le han mandado el ritalin.... Espero que me ayudes
ResponderEliminarLa medicación es una decisión que deben tomar los progenitores.
EliminarEl tratamiento no es sólo farmacológico. A los niños/as hay que enseñarles estrategias cognitivo-conductuales, emocionales, y proporcionarles apoyo psicopedagógico.
Si falta alguno de estos tratamientos, el resultado no es tan bueno.
Los padres también debemos aprender a manejar el TDAH, y técnicas de modificación de conducta. Es fundamental que apliques el refuerzo positivo siempre que sea posible, para que tu hijo perciba que es muy querido y que tiene un gran valor como persona.
La medicación es necesaria en algunos casos, pero tiene que ser valorado por el médico. Los niños/as prescritos con medicación suelen tener muy buenos resultados, pero cada niño es diferente.
Encontrarás mucha información en este blog. Debajo de mis datos personales, hay diferentes manuales muy amenos y que pueden ayudarte mucho.
¡Ánimo!
Hola Carolina, encantada de saludarte.
ResponderEliminarEn Perú, conozco a la Asociación APDA: la Asociación Peruana de Déficit de Atención.
Esta es su página web:
http://deficitdeatencionperu.com/apda-la-asociacion-peruana-de-deficit-de-atencion.html
https://es-es.facebook.com/ApdaPeruCom
Y este, su correo electrónico:
Email:apda@deficitdeatencionperu.com
Yo siempre recomiendo contactar con alguna asociación.
Espero que puedan ayudarte!!
Un abrazo